Kioto
Café es la representación del universo Mila Kartei.
La atmósfera
elegida plasma la relación entre todos los elementos inspiracionales de la
marca. La oferta es feliz y con un toque de humor, las formas son redondeadeas,
los colores pasteles. Ecléctico sí, pero refinado a su vez. La propuesta es integral; la marca refuerza
conceptos que viene trabajando temporada tras temporada. La mezcla da pureza y recrea una propia
realidad, elementos y guiños retro que construyen un propio lenguaje, un propio
sistema de comunicación.
El
café que elegiría la chica Mila Kartei.
Para
construir la colección las constantes son: tendencia a lo femenino, siluetas de
los años 50 y 60. Bordados a mano y texturas. Estampados propios, ropa de
fiesta y lujo sin pretensión.
Por
otra parte las variables que se utilizaron son una serie de imágenes japonesas
de fines de los años 20. La marcada influencia de arte japonés en dichos años también
es un punto de partida esencial a la hora de componer y diseñar la colección.
La sutileza con que el oriente toma a la naturaleza, sus colores pasteles y
flores se relaciona con lo frágil y etéreo de los estampados elegidos.
Sin
embargo, y para seguir con el contraste que propone la marca en términos de ícono
femenino, éste se actualiza, da un giro y se moderniza con la utilización y
combinación de colores plenos, cítricos y materiales descontextualizados como
piezas metálicas e industriales . La cuota actual va de la mano de textiles
tecnológicos como las rafias de seda natural, neoprenes calados en láser y
gazares bordados con piedras fusionadas con calor.
Además de esta colección, la marca planea un evento
exclusivo que reforzara la idea del universo Mila Kartei y que a su vez estará desde noviembre con sus puertas abiertas en su nuevo
atelier, showroom especialmente diseñado.
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